El papel de la pesca sustentable en la cocina mexicana
abril 7, 2021
El papel de la pesca sustentable en la cocina mexicana
abril 7, 2021

Compra y conserva el pescado para esta Cuaresma con los tips de los expertos

La Cuaresma es la temporada del año en la que más se consumen pescados y mariscos. Según información de Comepesca, su consumo aumenta hasta un 40 por ciento comparado con el resto del año.

“El año pasado se consumieron alrededor de 320 mil toneladas de pescados y mariscos, y esperamos este año no sea la excepción, sobretodo con la facilidad que existe para comprarlo”, explica Luis Bourillón, vicepresidente de sustentabilidad de Comepesca.

¿En qué fijarse al comprar un pescado?

  1.  Los ojos: si vas a comprar un pescado fresco siempre se recomienda fijarse, primero, en los ojos. Checa que no estén hundidos ni resecos, que se vean todavía con brillo.
  2. Agallas: cuando el pescado es fresco generalmente todavía en las branquias tiene sus agallas; así es que hay que fijarse que estén rojas. Si están blancas o muy pálidas quiere decir que el pescado ya lleva tiempo fuera ya que se reseca una vez que se guarda en cámaras de congelación.
  3. Su piel: asegúrate que esté firme. Si presionas su piel con el dedo y la carne permanece hundida o, si incluso se rompe la piel, significa que ya no está en buen estado.
  4. Su aroma: tiene que oler a pescado. Ese típico olor a mar sin que sea tan fuerte o repugnante que te produzca una reacción negativa.

Consérvalo correctamente

Se recomienda que si compras pescado fresco, lo consumas ese mismo día o al día siguiente. Ya que llegaste a casa, refrigera de inmediato. “No lo dejen mucho tiempo fuera del refrigerador después de comprarlo y únicamente vayan sacando del congelador las piezas o filetes que vayan necesitando”, recomienda Luis.

Ya que estés listo para cocinarlo, el experto recomienda ponerlo a descongelar por lo menos una hora antes de comenzar a cocinar. “Una manera muy sencilla y rápida de descongelarlo es ponerlo sobre una superficie de metal —una charola, sartén o tapa de olla— y, dependiendo de qué tan congelado esté y qué tan grande sea el trozo, generalmente bastará con media hora. También es importante que el agua que tiró al descongelarse se deseche y que la pieza esté lo más seca posible antes de ponerlo al sartén. Si cuando lo pones en aceite, éste salta mucho, quiere decir que tiene mucha agua y  llevó mucho tiempo en congelación”, explica.